Por desgracia, suele darse el despido por incapacidad permanente. En ocasiones, nos vemos envueltos en situaciones laborales que no sabemos cómo manejar. Para evitarlo, hay que saber cómo actuar.

A muchos no les entra en la cabeza que se produzca un despido por incapacidad permanente. Pero ocurre, más de lo habitual. E incluso despidos por cosas más sorprendentes. Pero el caso es que muchos no ven justo que se les despida por la pérdida de una capacidad. Desde Tierno Centella Abogados queremos explicarte todo lo que necesitas saber sobre este tema. Desde lo que es la incapacidad permanente, hasta cómo actuar. De esta manera, sabrás si estás en una situación semejante. Y, con la ayuda de profesionales como Tierno Centella Abogados, dar los pasos correctos.

Incapacidad permanente

El despido por incapacidad permanente parte de la situación en la que vive el trabajador. Se le denomina incapacidad permanente cuando las funciones físicas o psíquicas se ven reducidas, hasta el punto de no poder desempeñar su trabajo. A esto se le une que, antes de que se haga oficial, pasa por unos tratamientos. Si aún así, la recuperación no es al 100%, se considera incapacidad permanente.

En primer lugar, antes de actuar ante el despido por incapacidad permanente tenemos que descubrir qué es. Esta incapacidad puede aparecer por muchas causas.

  • Paseando por la calle, te puedes resbalar o puede caerse algo de algún balcón y golpearte.
  • Podrías sufrir un accidente en la carretera.
  • Has desarrollado una enfermedad congénita que estaba latente.
  • Te viste envuelto en una pelea.

Esto no quiere decir que no tiene por qué aparecer en el entorno laboral. La incapacidad labora, puede aparecer también en el trabajo, y la situación sería algo más precaria. Porque ya hablamos de responsabilidad laboral.

  • Falta de seguridad para los trabajadores, cuando realizan su función.
  • Exposición a productos peligrosos que no están contenidos de manera adecuada.
  • Herramientas de trabajo en mal estado o con falta de mantenimiento.
  • Condiciones insalubres en el área de trabajo.

Cómo debe actuar la empresa

El despido por incapacidad permanente se puede producir si, como anteriormente comentamos, las funciones del trabajador quedan drásticamente reducidas. No solo porque no podría desempeñar sus funciones como antes, sino porque podría desestabilizar a la empresa. Y los empresarios no pueden permitirse ningún fallo. Pero sí replantear el modo de trabajo, para que el trabajador siga formando parte del equipo.

  • Estudiar tus capacidades para comprobar cuáles son las que puedes realizar y que estén relacionadas con la empresa.
  • Si puedes realizar el trabajo, pero no durante mucho tiempo, reducir el número de horas.
  • Proporcionar el tiempo necesario para la rehabilitación y mantener su puesto, para cuando se recupere.
  • Darle la posibilidad de trabajar desde el domicilio, si no puede trasladarse con facilidad.

Son varias las actuaciones que puede realizar la empresa para evitar el despido por incapacidad permanente. A no ser que las capacidades sean totalmente nulas, la empresa puede mantener el puesto de trabajo. En caso contrario, el despido por incapacidad permanente podría ser inminente. Entonces, el comportamiento correcto de la empresa sería el que detallamos a continuación.

  • Rescindir contrato por falta de capacidades. No se consideraría despido disciplinario ya que, realmente, el trabajador no reúne las condiciones.
  • Indemnización en el caso de que la empresa sea responsable.
  • Entrega del finiquito correspondiente.

Despido por incapacidad permanente

Si la empresa sigue adelante con el despido por incapacidad permanente, a pesar de que las posibilidades para seguir en la empresa, ya tenemos que actuar. Porque una cosa es perder una habilidad necesaria para la tarea y otra, ser incapaz de llevar a cabo cualquier función. Si te descartan por completo, a pesar de poder realizar otras funciones, estamos ante un despido improcedente.

Y para no quedarse cruzados ante un despido por incapacidad permanente, tildado como improcedente, tienes que tener en cuenta varios factores.

  • Habilidades con las que cuentas y que se adaptan a las funciones u otras, de la empresa.
  • El tipo de contrato que tienes con la empresa.
  • Comprobar cuánta responsabilidad tiene la empresa respecto a la incapacidad permanente.
  • Si se le ha despedido durante la rehabilitación, porque esperaban que esta durase menos tiempo.
  • Si hay abuso de poder en la empresa o acoso laboral.

Despacho Tierno Centella Abogados

Para actuar ante un despido por incapacidad permanente debes tener claro que debes contar con profesionales. En el Despacho Tierno Centella Abogados estamos especializados en despidos y acoso laboral. Contacta con nosotros y cuéntanos tu situación. Te asesoraremos sobre la situación que vives y estudiaremos tu caso. Estamos seguros de que tiene solución, que podremos guiarte en los siguientes pasos a dar y conseguir ganar esta batalla.

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